Literalmente, pero esta vez merece la pena.
Hacía ya más de dos años, pero hoy al fin he vuelto donar sangre.
No duele, no se tarda, no causa efecto alguno en la salud, no cansa, no cuesta ningún trabajo... y a cambio se da algo tan grande como es vida.
En Granada en Centro Reginal de Transfusión Sanguínea está detrás de la plaza de toros, y abren mañana y tarde.
1 comentario:
waw!!!
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